El actual equipo en funciones al frente de la Seguridad Social tiene intención de incluir la medida en las próximas cuentas públicas si siguen dirigiendo este departamento
El diseño y aprobación de los Presupuestos Generales del Estado para 2020 deberían estar diseñados en septiembre para poder ser aprobados a final de año. Es más, el actual Gobierno en funciones ha llegado a decir que podría intentar aprobar in extremis unos Presupuestos para 2019, ya que en la actualidad están prorrogados los que hizo el PP en 2018, ante la falta de apoyos parlamentarios que tuvo el Ejecutivo socialista tras la moción de censura. En este caso, los Presupuestos de 2020 también se retrasarían unos meses.
En cualquier caso, el Gobierno de Pedro Sánchez espera lograr ser investido nuevamente y ponerse a trabajar inmediatamente en las cuentas públicas, ya sean para 2019 o, lo más probable, para 2020.
En ese próximo Presupuesto, el actual equipo del Ministerio de Trabajo que está en funciones, tiene la intención, si sigue el frente de este departamento, de reactivar la creación y publicación de una lista de empresas morosas con la Seguridad Social.
Se trataría, en principio, de hacer públicos los nombres de las compañías que no estén al corriente de pago de las cotizaciones sociales de sus empleados, según han confirmado fuentes de Trabajo.
La publicación de esta lista, similar a la que ya publica el Ministerio de Hacienda con los nombres de los morosos con el fisco, fue anunciada por primera vez en octubre de 2018 por el secretario de Estado de la Seguridad Social, hoy en funciones, Octavio Granado.
La intención primera del equipo de Trabajo fue incluir esta nueva lista de morosos en los Presupuestos Generales para 2019, ya que requería hacer cambios en la Ley General de Seguridad Social. Sin embargo, estos presupuestos no vieron la luz por falta de apoyos parlamentarios. Y, en el caso de esta medida, se descartó llevarla a cabo por real decreto, algo que también se habían planteado en un primer momento.
Según los planes que tenían quienes diseñaron esta lista desde la Tesorería General de la Seguridad Social (TGSS), el umbral de deuda por impago de cotizaciones que llevaría a las empresas a aparecer quedaría fijado por regla general en un millón de euros.
No obstante, la medida debería desarrollarse posteriormente en un reglamento que precisaría asuntos como si se podría descender del umbral de un millón de deudas en algún caso para ser incluido en la lista, o si además del nombre de la empresa morosa se haría también público el nombre de sus administradores, por ejemplo.
De momento, la Seguridad Social ya detectó más de 1.100 empresas que adeudaban más de un millón de euros al sistema por impagos de cotizaciones sociales.
Pero, en general, la tasa de morosidad de la Seguridad Social es baja y el pasado año se situó en el entorno del 1%, muy cerca del mínimo histórico del 0,96%.De una cota que en este organismo creen que será difícil de mejorar.
Así de los alrededor de 115.000 millones que la Seguridad Social recaudó el pasado año por cotizaciones sociales, una tasa de morosidad en el entorno del 1% supondría que el sistema de pensiones dejaría de recaudar aproximadamente 1.150 millones por los impagos de los empresarios cada año.
Los últimos datos facilitados por Trabajo apuntaban que la deuda total acumulada que estaba a finales del pasado año en vía de apremio ascendía a unos 4.500 millones de euros, de los cuales cerca de 1.800 se habría generado en el último año.
Esta deuda es sobre la que las Unidades de Recaudación Ejecutiva (URE) de la Tesorería ya habían iniciado procedimientos para su cobro incluso a través de embargos.
A esta deuda acumulada en apremio, se suman casi 1.200 millones de aplazamientos de pago negociados entre las empresas con dificultades y la Seguridad Social.
En cualquier caso, a pesar de la futura publicación de esta lista de empresas morosas la actual tasa de morosidad en el citado 1% es una cota que será muy difícil bajar según han admitido desde la propia Seguridad Social.
(Noticia extraída de Cinco Días)