Una sentencia entiende que no se puede despedir a un empleado si su madre testifica que apalabró con su jefe no asistir al trabajo y seguir cobrando su salario, tras haber sido dado de alta.
No hubo acuerdo por escrito, tal como se debe proceder en estas circunstancias. Únicamente, se dio un entendimiento de palabra, apoyado por la verificación de la madre del trabajador. Estas pruebas han sido suficientes para que el juzgado de lo social de Móstoles dé la razón al empleado de un pequeño taller mecánico y haya sido readmitido por la empresa, a pesar de no haberse reincorporado al trabajo tras haber recibido el alta. La sentencia ha sido confirmada por el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJ).
Los hechos se remontan al momento en que el trabajador «causó baja médica», siendo formalizado posteriormente el parte médico de alta para su reincorporación, según contempla la sentencia del juzgado de lo social de Móstoles. El Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) notificó a la empresa la resolución del alta, «que fue notificada en mano al empleado». Éste nunca se reincorporó a su puesto. Se limitó únicamente a acudir al taller, en compañía de su madre, y apalabró de forma verbal con su jefe el continuar de baja manteniendo el salario.
Al no producirse la vuelta del trabajador, la empresa le comunicó mediante distintos avisos, como burofax, teléfono y mensajes de whatsapp, que justificara sus continuadas ausencias. Posteriormente, se le informó por las mismas vías de su despido.
Los jueces consideran su despido improcedente y, además de tener la empresa que volver a admitirlo en su plantilla, deberá abonarle una indemnización de 17.154 euros. La demandada ha aportado las distintas pruebas de avisos que dio al trabajador para que volviera a trabajar y para que explicara sus ausencias. A la justicia le ha bastado únicamente con el testimonio de una madre para ponerse del lado del trabajador.
Los abogados de la empresa demandada están estudiando acudir al Tribunal Supremo para que se vuelva a estudiar el fallo, al considerar «prueba insuficiente» el testimonio de una madre.
(Noticia extraída de Expansión)