Le ayudamos a hacerlo de la forma más beneficiosa.
Si su empresa se ve obligada a solicitar el aplazamiento de algún impuesto, sepa que existen algunas restricciones –no se puede aplazar el ingreso de las retenciones o de los pagos fraccionados del Impuesto sobre Sociedades–. Además:
• Respecto al IVA, existen algunas normas que complican su aplazamiento en los casos en que es necesario aportar garantía (paradójicamente, el aplazamiento de este impuesto es más sencillo si no deben aportarse garantías, lo que sucede cuando las deudas aplazadas no superan los 30.000 euros).
• Si el pago se fracciona en varios plazos, es posible presentar garantía por cada uno de los plazos (para poder retirarla a medida que éstos se van cumpliendo).
Aplazamientos
Todo ello hace que deban analizarse con detenimiento los impuestos e importes que se aplazan y los que se garantizan.
En ocasiones puede ser conveniente aportar garantía aunque la deuda aplazada no alcance los 30.000 euros, con el fin de no “consumir” ese margen y poder solicitar en el futuro aplazamientos de IVA con mayores posibilidades de que sean concedidos.
