La desigualdad entre hombres y mujeres no sólo se deja sentir en los salarios o en los puestos de dirección, continúa una vez que termina la carrera laboral. Según un estudio elaborado por el Instituto Aviva, las mujeres cobran de media una pensión de jubilación un 37% menor que los hombres. E incluso en algunas Comunidades Autónomas, como Asturias, la diferencia es incluso superior y llega hasta el 49,7%.
Lejos de ignorar esta realidad, la jubilación es una de las principales preocupaciones de las mujeres en términos financieros por encima de la compra de una vivienda o de la contratación de una hipoteca. Por eso, más de la mitad (54%) se muestra convencida de que el ahorro privado será la primera fuente de ingresos a la que tendrán que recurrir en el futuro para complementar la prestación pública.
Y es que las mujeres confían en menor medida que los hombres en que la pensión pública de jubilación pueda cubrir sus gastos mínimos para vivir, según este estudio que analiza el comportamiento de los españoles ante el ahorro, la jubilación y el riesgo.
«A pesar de que en los últimos años la sociedad española ha hecho grandes avances respecto a la igualdad real de hombres y mujeres, sabemos que todavía queda mucho camino por recorrer», asegura José Manuel Jiménez, director del Instituto Aviva. «Las diferencias (de sueldos) se amplían a partir de los 30 años, coincidiendo con la edad de la maternidad. Una menor remuneración salarial conlleva, por lo general, una menor pensión por jubilación. Así, en 2015, la cuantía media de las pensiones de las nuevas altas de jubilación de las mujeres fue un 25% inferior a la de los hombres», añade.
A la vista de estos datos, no resulta extraño que un 57,9% de los españoles estime que las mujeres trabajadoras están desprotegidas por el sistema público de pensiones. Esta cifra es 19,5 puntos superior respecto a sus compañeros varones (38,4%).
Por eso, si es usted mujer y se ha jubilado o está a punto de hacerlo, le convendría saber que aunque no existe ningún tratamiento especial en las cotizaciones por cuestión de género; sí existe en la pensión de jubilación. Así, aquellas trabajadoras que se hayan jubilado a partir del 1 de enero de 2016 pueden incrementar su pensión hasta un 15%, dependiendo del número de hijos que hayan tenido, adoptado o acogido durante su vida como cotizantes.
(Noticia extraída de El Mundo)