Quién diría que en los primeros años del siglo XXI, con una mayor incorporación de la mujer al trabajo y mayores niveles educativos, la igualdad de género haya retrocedido. Ahora, la brecha social y económica entre hombres y mujeres es mayor que en el 2008, hace 8 años, y el salario es el elemento que más influye en esta discriminación, que no se corregirá hasta dentro de 170 años.
El Foro Económico Mundial (FEM), una organización sin ánimo de lucro con sede en Ginebra, ha tenido que revisar a la baja sus propias previsiones sobre igualdad al constatar un estancamiento en las condiciones de vida de las mujeres en la inmensa mayoría de los países desarrollados. Si el informe del año pasado apuntaba a que la brecha económica podría cerrarse en el año 2133, dentro de 118 años, ahora aplaza su resolución hasta el 2186, es decir, 170 años. Siempre y cuanto las cosas sigan como hasta ahora y no haya catástrofes o guerras que cambien el panorama de las sociedades en las que, tgradicionalmente, las mujeres han sido las más perjudicadas por las crisis de todo tipo.
BRECHA MUNDIAL
El informe analiza la situación de ambos géneros en educación, salud y supervivencia, oportunidades económica y presencia en el poder político y concluye que existe una brecha del 59%, en la que el cien por cien representaría la plena igualdad.
En educación se constata que el esfuerzo realizado en las últimas décadas ha dado sus frutos y que es una de las dos áreas donde más se ha avanzado en el camino de la igualdad. La brecha educativa es del 95%. Aunque se constata un cierto deterioro en el terreno de salud y supervivencia, la brecha se mantiene está en el 96%.
En el terreno económico y del empoderamiento político la discriminación mantiene cotas altas. El informe del Foro Mundial indica un estancamiento de la participación en el mercado de trabajo, con una presencia media del 54% de mujeres en todo el mundo frente al 81% de hombres. A ello hay que sumar la discriminación salarial que no solo es propia de países menos desarrollados, sino que se cuelga en los de alto nivel económico como han mostrado recientes estudios.
LA MITAD DEL SALARIO
Según los cálculos del FEM, las mujeres de todo el mundo ingresan de media poco más de la mitad de lo que ganan los hombres, pese a que trabajan más horas dentro y fuera de casa.
Asimismo, la presencia de mujeres en puestos de responsabilidad también se mantiene en niveles muy bajos. Sólo cuatro de los 144 países estudiados en el informe tienen igual número de hombres y mujeres en sus cámaras legislativas, y como funcionarios de alto grado y directivos, a pesar de que 95 países cuentan ahora con tantas mujeres como hombres con formación universitaria.
«El mundo se enfrenta a un desperdicio del talento al no actuar con rapidez para frenar la desigualdad de género. Esto podría poner el crecimiento económico en riesgo y privar a las economías de la oportunidad de desarrollarse», apunta el informe.
Saadia Zahidi, jefa de iniciativas de empleo y de género y miembro de la ejecutiva del Foro Económico Mundial, ha indicado que las negativas previsiones realizadas por este organismo son una «llamada de atención» a los responsables políticos para redoblar los esfuerzos para acelerar la igualdad de género.
ESPAÑA Y EUROPA RETROCEDEN
Los avances para cerrar la brecha de género se han frenado en todos los países, excepto en Ruanda, que tras superar una guerra y un genocidio, se ha convertido en el líder de la igualdad salarial, gracias al empoderamiento económico que se está dando a las mujeres.
El informe muestra que en Europa el retroceso es tangible y también en España. Islandia, Finlandia y Noruega son los países más igualitarios del mundo, seguidos por Suecia y el citado Ruanda.
España, que en el 2006, primer año en que el foro elaboró el informe, ocupaba el puesto número 11 de los países europeos, bajó al 25 en el 2015 y ahora está en la posición 29.
En la clasificación de oportunidades económicas, España, con altas tasas de temporalidad y precariedad en el empleo, cae a la posición 72, cinco menos que el año pasado, mientras que en el nivel educativo asciende al puesto 43 (desde el 47 del año pasado). En la evaluación de la representación política se mantienen en la misma posición, la 26, que hace un año.
A pesar de que Europa Occidental es la región del mundo en que la brecha de género es menor, con un 25% de media, sólo dos de los 20 países de la zona, Finlandia y Francia, tienen plena igualdad en los ámbitos de educación, salud y supervivencia.
(Noticia extraída de El Periódico de Catalunya)