La Agència Tributària de Catalunya (ATC) ha iniciado el proceso de licitación para abrir 14 oficinas propias repartidas por el territorio. Esta medida supone «el pistoletazo de salida» del nuevo modelo de implantación territorial del embrión de la futura hacienda propia, según fuentes del Ejecutivo catalán
El despliegue territorial forma parte de la estrategia de crecimiento de la ATC, que en el plazo de 10 meses prevé duplicar su plantilla, hasta 800 personas. Además tiene previsto llevar a cabo la liquidación y recaudación de todos los tributos cedidos. En la actualidad dos tercios de estos ingresos los gestionan las oficinas liquidadoras de los registros.
En este sentido se ha creado una comisión con Registradores de Catalunya con el objetivo de zanjar la colaboración de todos estos años. Inicialmente el plan era denunciar el convenio este mismo mes, pero dada la complejidad del proceso y que el periodo de preaviso legal para denunciar el acuerdo no vence hasta enero próximo, la secretaría de Hacienda de la Generalitat ha optado por ralentizar el ritmo, aunque con el mismo objetivo.
También está previsto que la ATC realice toda la recaudación ejecutiva (embargos) que en la actualidad tiene encomendada la agencia tributaria estatal.
CONCURSO PÚBLICO
El concurso público para el alquiler de oficinas especifica 14 lotes con datos de ubicación, superficie construida (entre 200 y 650 metros cuadrados) y el precio máximo (entre 4,5 euros y 9 euros el metro cuadrado mensual) que deberán cumplir los locales. La Generalitat prevé destinar 6,2 millones de euros en este proceso y 3,2 millones de gastos recurrentes anuales
Como paso previo, la ATC avanzará la apertura de la oficina del Barcelonès Nord, que supone elevar la red de oficinas propias hasta 15. Concretamente se trata de un local de unos 850 metros cuadrados, con capacidad para 45 personas, en la calle Joan d’Àustria de la capital catalana.
Está previsto que estas instalaciones inicien su actividad a principios del año que viene, una vez que se haya firmado el contrato de alquiler. La oficina dará servicio a los contribuyentes de la parte norte de Barcelona y de los municipios de la zona. El resto de los ciudadanos de la capital catalana seguirán siendo atendidos por la delegación central ubicada en el barrio de La Marina, donde se encuentra la sede central de la ATC.
El despliegue, que dejará amplias zonas de la Catalunya central y pirenaica sin oficinas, prevé una segunda fase en la que se incluirá personal de la AC en Tributs de Catalunya, mediante una ventanilla única establecida por convenio en 142 oficinas a través de convenios de colaboración con la administraciones locales (diputaciones, consells comarcals y ayuntamientos).
Hoy, la hacienda catalana recauda directamente 1.242 millones de euros de los 3.097 millones procedentes de ingresos tributarios que no están sujetos a anticipos del sistema de financiación autonómica. Esta cifra supone el 40% del total. En la primera fase de despliegue competencial se pasará a recaudar 2.306 millones.
(Noticia extraída de El Periódico de Catalunya)